Las señales de que el bebé está listo para comenzar a comer alimentos sólidos son: sentarse sin ayuda, hacer movimientos de masticación con la boca, interesarse por la comida, sujetarla y llevársela a la boca.
Una habilidad clave a considerar es la de pasar de los movimientos propios de la succión cuando el bebé se lleva un alimento sólido a la boca a los de una acción propia de la masticación; es lo que se denomina “alimentación dirigida por el bebé”.
Es probable que los bebés que no reciben alimentos sólidos antes de los 10 meses tarden más en aprender a sujetar la comida, llevársela a la boca y masticar. Sin embargo, algunos bebés no muestran ningún interés en otro alimento que no sea la lactancia materna. Busca señales de que tu bebé está listo y siéntalo en la mesa contigo, ya que esto lo animará a imitar y a interesarse en probar tu comida. Dale algo de comida con la que pueda jugar con sus dedos, pero asegúrese de que sea del tamaño adecuado y de que no pueda atragantarse.
Al inicio de la alimentación complementaria, es importante buscar posibles respuestas alérgicas, por lo que debes darle un alimento nuevo cada vez para observar cualquier reacción.
Dale a tu bebé una dieta rica nutricionalmente con la introducción de alimentos sencillos de manipular con los dedos y con formas naturales, como brochetas de brócoli cocinadas o zanahoria cocida y cortada como patatas fritas, así como parte de su comida hecha puré.
Tu bebé todavía está desarrollando su capacidad para agarrar con el dedo y el pulgar (agarre de pinza), por lo que al empezar utilizará el agarre completo (agarre palmar).
Es posible que te preocupe que tu bebé se atragante, así que asegúrate de estar siempre con él cuando coma y de que los alimentos sean suaves, estén triturados o puedan ser masticados fácilmente por el bebé. Esta es la principal razón por la que es importante esperar hasta que el bebé pueda sentarse por sí mismo antes de introducir los alimentos sólidos. Sentarse les permite mover libremente su lengua alrededor de su boca, y controlar así la comida.
Es posible que tu bebé no tome alimentos sólidos de inmediato, por lo que debes buscar señales que indiquen cuando está listo. Sacar la comida con la lengua significa, por lo general, que aún no está listo, incluso si todos los otros signos indican lo contrario. Simplemente sigue intentándolo y ofrece a tu bebé diferentes alimentos (purés y sólidos) y déjalo elegir.
Los bebés cubren todas sus necesidades de sodio con la leche materna, por lo que no es necesario agregar sal a ninguno de los alimentos del bebé, ya sean frescos o envasados. Cocinar tus comidas sin sal te ayudará a mantener la ingesta de sal que el bebé necesita.
Reconocer cuando tu bebé está listo para la alimentación complementaria te evita introducirla demasiado pronto, lo que podría alterar la digestión del bebé y su patrón de lactancia. Una vez que el bebé esté listo, déjale tomar la iniciativa. ¡Es un poco caótico, pero muy divertido!