Aún no camina tu bebé, pero moverse será su gran aventura, por eso el baño puede suponer un auténtico desastre. Te ofrecemos algunos consejos para hacer que la hora del baño sea divertida y segura.
Una vez empieces a bañar al bebé de manera regular, aquí tienes algunos consejos que funcionan bien:
- Elige un momento en que te sientas relajada y no tengas prisa. Bañarse debe ser un momento divertido para ti y tu bebé. Puedes bañarlo tras un tiempo de juego intenso, de manera que el bebé necesite sentarse y descansar.
- No bañes al bebé justo después de comer, ni cuando tenga hambre o esté muy cansado.
- Tómate tu tiempo para proporcionarle un ambiente cómodo, agradable y cálido, sin corrientes de aire.
- Involucra a papá o a tu pareja, ya que es una oportunidad excelente para disfrutar de un tiempo especial juntos.
- Prepara todo antes de empezar, ya que es vital no dejar al bebé solo en el baño en ningún momento. Esto es lo que necesitas:
- Toallas
- Una esponja suave o toallitas/manoplas de baño
- Ropa limpia
- Un pañal
- Un juguete de baño
- Un libro de baño (“The Flying Bath” es uno de nuestros favoritos en particular)
- Artículos de cosmética. (Prueba nuestro champú de mandarina y jabón corporal Earth Friendly Baby Happy. Con su delicado aroma, es lo suficientemente suave para el uso diario e ideal para nutrir la piel seca y sensible del bebé)
- Un soporte de baño para el bebé, de manera que tus dos manos estén libres y puedas concentrarte en pasar un rato divertido
- Recuerda que cuando saques al bebé de la bañera, disfrutará por el hecho de estar mojado, así que sostén con firmeza a tu dulce y resbaladizo bebé.
- Puedes envolver al bebé en una toalla y ofrecerle el pecho para que esté quieto mientras lo secas.
- En el baño, el bebé puede empezar a lavarse él solo, y también disfrutará estirándose y moviéndose, así que asegúrate de que el nivel del agua no llegue a sus oídos. Puedes empezar a enseñarle a lavarse el cabello.
- Tu bebé también disfrutará echándose agua sobre la cabeza, así que es imprescindible disponer de varios juguetes en la bañera que le ayuden a lavarse y enjuagarse.
Algunos consejos de seguridad:
- La temperatura del agua no debe estar demasiado caliente ni fría. Prueba el agua sumergiendo tu codo en el agua antes de meter al pequeño. Si te parece cálida y agradable, entonces el baño debe estar bien. De cualquier forma, tu bebé te informará de inmediato si se siente incómodo. Es habitual que los padres pongan el agua demasiado fría y que luego se pregunten por qué grita el bebé.
- ¡Cuídate! A medida que el bebé crece, debes asegurarte de que lo metes y sacas del baño con más cuidado. Dobla las rodillas, mantén la espalda recta y aproxímate lo más posible a la bañera. Puedes poner un pequeño peldaño para que el bebé pueda subir (con tu ayuda, por supuesto), pero asegúrate de que luego quede fuera de su alcance. Puedes pensar en utilizar un grifo extraíble para que, de esta forma, no pueda inundar el baño ni llenar la bañera con agua caliente. Pídele ayuda a tu pareja si no utilizas un peldaño y no puedes meter o sacar al bebé de la bañera.
Tu bebé se está convirtiendo en toda una persona independiente, llena de vida y con mucha energía, así que la hora del baño es una gran oportunidad para frenarlo un poco y divertiros mucho.
Dar el pecho al final del baño es también un gran incentivo para disfrutar juntos de este momento especial.